ADIÓS al hombre del ecumenismo en Salamanca

Esta tarde del 10 de junio hemos despedido, en la catedral nueva de Salamanca, al hombre del ecumenismo, D. José Sánchez Vaquero. D. José era otras muchas cosas: el hombre de Valdejimena, el hombre de la basílica teresiana de Alba de Tormes, el profesor de patrología de la Universidad Pontificia, el canónigo archivero de la catedral de Salamanca. Pero, ante todo, era el hombre del ecumenismo, el hombre luchador por la unidad de todos los cristianos. Ecumenismo teórico y de investigación de la Universidad Pontificia de Salamanca, con proyección en España, en Europa y en Norteamérica. Pero también de la pastoral ecuménica, de la Asociación Juan XXII, de la delegación diocesana de ecumenismo, de la asociación ecuménica internacional, la IEF.
Desde que yo me hice cargo de la delegación diocesana de misiones, trabajamos en colaboración. El ecumenismo nació de la misión, de la necesidad de presentar juntos todos los cristianos el único rostro de Jesucristo. Por eso, hemos intentado trabajar juntos, en Salamanca, y con proyección en el exterior, el ecumenismo y la misión.
Adiós, D. José: Que nos sigas ayudando desde el cielo.

Juan Robles
Delegado diocesano de misiones de Salamanca